Los contenidos en internet se distribuyen en espacios cada vez más complejos, ya sea por el posicionamiento de estos o bien por el alcance de audiencia al que puedan llegar. Y la definición de cuál carrera se desea correr, puede definir el éxito o el fracaso de tu empresa.
Estudiar, innovar, imaginar, inventar son los verbos que diariamente los desarrolladores SEO deben poner en poner en práctica para superar los desafíos que la web les propone.
Por esto, tanto Google como Facebook, cada uno con sus características particulares, vienen a convertirse en una verdadera prueba para quienes se dedican al posicionamiento SEO, dado que con el tiempo las reglas se han ido ajustando y, por lo tanto, los márgenes de movimiento de los contenido, reduciendo.
“Facebook es un tema muy complejo porque es una internet muy cerrada. Uno podría decir que es como cualquier aplicación cerrada, pero mueve buena parte del tráfico de internet y los contenidos se desarrollan ahí”, sostiene el director de la agencia SEO, ROI, Uri Martinich, que con 14 años en el mercado plantea las complejidades y los desafíos del nuevo escenario.
En este sentido, Martinich cree que “el problema es que los contenidos no están abiertos a los buscadores, por lo tanto Google no puede leer Facebook y lo que intenta hacer Facebbook es que la gente pase la mayor parte del tiempo en su red”. Y destaca que “uno de los principales desafíos es que Facebook es un espacio cerrado”.
Así, el ejecutivo sostiene que una de las principales dificultades se se da en el diferente trato que da Google y Facebook a los contenidos que ofrecen, ya que “el SEO es para motores de búsqueda, como Google, aunque existe la posibilidad de trabajar del posicionamiento de la búsqueda de Facebook, pero lo más complejo es que cuando entras ahí juegas con sus reglas”.
Y nos da el siguiente ejemplo: “yo puedo tener un sitio web que no le guste a Google o que no lo rankee o no lo pueda posicionar, pero no lo saca, en cambio Facebook sí. Puede cambiar las reglas, hacer desaparecer una página y ya está, porque es cerrado”. Y, al mismo tiempo, refuerza el ejercicio señalando que “un ejemplo, es cuando cambio el alcance de las publicaciones de las páginas de Facebook. Cuando uno publicaba algo lo venía un 20 % de sus fans y luego si ellos lo compartían podían verlo todos”.
“Ese alcance cayó al uno o tres por ciento”, estima Martinich, quien explica que el camino fácil es: “si uno no paga probablemente nadie la vea”. Y, reglón seguido, plantea el desafío, ya que “si Facebook cambió las reglas del juego una vez, puede hacerlo de nuevo y es ahí donde tenemos el principal desafío”.
¿Qué pasa con Google?, Martinich responde directo: “En el caso de Google el desafío está para los malos SEO, aquellos que hacen trabajo a corto plazo, porque las trampas las ha ido pillando. Cada vez es más difícil salir de Google en el caso de un proyecto de limpieza de imagen digital, por lo tanto, no se puede hacer pillería”.
De igual manera, señala que el algoritmo de Google impide que los tramposos sean los que se lleven buena parte del mercado del posicionamiento SEO, ya que “hoy el motor de Google se va actualizando, por lo que se hace muy difícil para las agencias SEO con prácticas oscuras. Para el resto, sólo nos preocupa hacer bien nuestro trabajo”.
Y, de igual forma, el ejecutivo sostiene que este formato permite fomentar la creatividad, elemento que considera fundamental en el trabajo diario de la compañía que dirige, donde destaca que “en el caso de ROI nos permite mucho experimentar, cosa que nos favorece para mantenernos por delante de la competencia”.