El economista Juan Pablo Swett, fue uno de los primeros en manifestar, a través de sus redes sociales, su rechazo al actual acuerdo que existiría en materia de Pensiones, apuntando directamente a los efectos que éste tendría sobre las MiPymes de nuestro país. En su cuenta de X, Swett expresó: “Esto es una vergüenza, no piensan que 4,5 millones de Chilenos (la mitad del total) trabaja en una MiPyme? El estado va a ayudar a las micros y pequeñas? Llegan y suben cotizaciones sin preguntarnos?!!! Esto no tiene calle… ni pies ni cabeza tampoco”.
Según datos actuales de la Subsecretaria de Relaciones Económicas Internacionales, en Chile existen 1.168.049 MiPymes, que generan el 43% del empleo nacional. Muchas de ellas ya enfrentan dificultades económicas derivadas de la pandemia y de las alzas de costos que han golpeado la economía global.
La reciente Reforma Previsional presentada por el gobierno ha generado un fuerte debate en diversos sectores de la economía, pero uno de los que podría ser más afectados que hasta ahora había quedado invisibilizado son las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes). La propuesta de aumentar la cotización previsional en más de un 6% con cargo al empleador, que ha sido discutida en el Senado, podría poner en riesgo a una industria que lucha por mantener sus negocios mensualmente, en la que trabajan 4,5 millones de Chilenos, según lo que manifestó Swett en su cuenta.
La crítica de Swett hace referencia a un punto clave de la reforma; la imposición de una cotización adicional de cargo de los empleadores, que en parte no será destinada directamente a los ahorros del trabajador, sino también se irá a fondos del Gobierno. La voz de economistas como Juan Pablo Swett, refleja una legítima preocupación sobre cómo estos cambios podrían afectar la capacidad para que las MiPymes sigan operando y generen empleo.
En su cuenta el economista interpela al Gobierno cuestionando si “El estado va a ayudar a las micros y pequeñas”. Las MiPymes, enfrentan una situación delicada, en la que un aumento en los costos laborales podría llevar a una mayor informalidad, recortes en la planilla de trabajadores o incluso al cierre de pequeñas empresas que ya operan con márgenes de ganancia ajustados. Esto se debe a que, a diferencia de las grandes empresas, las MiPymes carecen de los recursos y economías de escala necesarias para absorber incrementos en los costos sin que ello afecte su rentabilidad.Hasta ahora el Gobierno no se ha manifestado sobre el impacto de esta medida en las micro, pequeñas y medianas Empresas.