La digitalización de los servicios a nivel mundial, es un fenómeno que irá en aumento a medida que avanzan los años. En el mundo financiero, las FinTech son un ejemplo de ello. De la unión de “finance” (finanzas) con “technology” (tecnología), nació un nuevo modelo de negocio que compite con la banca tradicional. En Chile, Capitaria fue una de las primeras empresas en hacerlo, gracias a su servicio personalizado de trading (compra y posterior venta de activos en el mercado para generar ganancias).
Al igual que Capitaria, en nuestro país son varias las empresas financieras que han decidido optar por un modelo tecnológico moderno. Una de ellas es Fintual, empresa que ofrece un servicio parecido al de Capitaria, pero para usuarios más novatos.
Carencia de regulación
Pero a pesar de que son muchas las empresas que han nacido al alero de las nuevas tecnologías, el Estado no ha elaborado ningún tipo de regulación que guíe a este tipo de negocios.
Según Capitaria, debieran existir reglas para aquellas nuevas empresas que quieran entrar al mundo de las FinTech. Estas deberían por lo menos, poseer un capital adecuado que permita a los clientes tener la tranquilidad de que su dinero está siendo bien resguardado.
Por el momento, solo existe una agrupación que engloba a las FinTech chilenas (FinteChile). Mientras tanto, en otros países latinoamericanos como Brasil, Uruguay y Colombia, sí han promulgado nuevas leyes que regulan a estas empresas, asegurando así el bienestar de los clientes.
Ventajas sobre la banca tradicional
La cobertura de servicios dedicados a los nuevos nichos de usuarios, es una realidad para muchos mercados. El mundo de las finanzas también ha tenido que hacerse cargo de eso, creando nuevas alternativas, siendo las FinTech, las principales empresas dedicadas a la innovación.
En este último punto, se describe una de las principales ventajas de las nuevas empresas por sobre la banca tradicional. Estos nuevos negocios han sabido prestar servicios que los bancos no prestan. Por ejemplo, en Chile la aplicación Fintonic permite a sus usuarios ordenar sus finanzas de manera fácil y gratuita. En cambio, las aplicaciones de bancos solo informan sobre los estados de cuenta y no aconsejan al cliente sobre su situación financiera.
A su vez, las FinTech funcionan realizando muchos menos gastos que los bancos y financieras establecidas, debido a que muchos de sus servicios están digitalizados. Esto compone otra ventaja, ya que se traduce en un menor valor para los clientes.
En Capitaria, por ejemplo, afirman que hay una diferencia entre invertir en su empresa versus la aplicación de algún banco: “Apuntamos a un nicho específico dentro del mundo de las inversiones. Nuestros clientes encuentran oportunidades de alto riesgo, y por ende alto retorno. El 100 % de ellos invierte capitales de riesgo y no de ahorro, cosa que sí se puede encontrar en APP del banco. De hecho, los bancos no dan acceso al mercado de los derivados financieros con facilidad, por lo que en general no somos para nada competencias”.
Panorama mundial y nacional
Cada año, KMPG y H2 Ventures elaboran un listado con las cien mejores empresas FinTech en el mundo. EE.UU. es quien posee el mayor número de negocios posee en el ranking, seguido de Reino Unido y China.
Por el momento, Chile no ha aparecido en listado, a diferencia de Brasil y Argentina, quienes poseen 4 y 1 FinTech respectivamente en el ranking mundial. En el caso del país trasandino, su empresa Uala se ganó un puesto gracias a una tarjeta maestra que permite realizar compras en diferentes comercios internacionales.
La presencia de Chile podría asegurarse si una regulación apareciera. Esto permitiría fomentar el desarrollo tecnológico y expansión en los mercados. “En Capitaria estamos trabajando en fortalecer los canales digitales para clientes. La idea este año que ya llega es poder llevar nuestra empresa a más países de Latinoamérica. Hoy tenemos oficinas en Chile, Lima y Montevideo. Durante el próximo año queremos estar en Argentina y Colombia”, afirman desde la compañía.